Revenge, Coralie Fargeat, 2017


Dentro del amplio género del terror, el subgénero de subgénero que menos me interesa es el conocido como "Violación y venganza". No voy a explicar en qué consiste porque eso lo sabemos todo y quién no lo sepa el propio nombre ya da pistas suficientes. Así que de entrada esta película no entraba dentro de mis planes de visionado, pero cuando leí un par de críticas de gente seria que la ponían a caer de un burro cambié de idea. Y después de verla no podía estar más contento.


Para mí Revenge es una película de fantasía; una sublimación estética del subgénero que huye del realismo dando a la historia un aire de cuento cruel donde una princesa resucita de la muerte (o un fénix resurgiendo de las llamas como se deja bien claro de forma poco sutil, pero bonita) para vengarse de eso tres cretinos que la violaron ya sea físicamente, por omisión y complicidad y por traición.

 
Fotografía muy contrastada y con mucha saturación. Aire de belleza publicitaria para los momentos de violencia extrema. El contraste entre la belleza formal y la brutalidad de la imagen; primeros planos de las heridas, cadáveres descompuestos y sangre, mucha sangre, demasiada sangre para caber en un cuerpo humano.





¿Y qué importa que no sea creíble o realista? ¿Qué importa si ella se cura pronto, si hay demasiada sangre, si...? Como he dicho antes, esto es una fantasía. Coger los elementos que definen un subgénero y exagerarlos hasta casi sublimación destilando los elementos clave y exagerándolos. La película dura una hora y media y aguanta muy bien su mínimo argumento de perros cazando a una gata y de una puma cazando a los perros.

 
Hasta llegar a unos veinte minutos finales bien planificados y absolutamente adrenalíticos donde se cambia los espacios abiertos del desierto por la arquitectura de una casa convertida en ratonera (y se necesita poco más que un par de pasillos).




Matilda Lutz con sus pendientes de estrella.


Y que ver como se desmonta la maculinidad tóxica de la vioolencia, el abuso y la impunidad por ser hombres a manos de una mujer siempre es divertido.

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